Si estás pensando en comprar una caseta para poder tener tu jardín perfectamente recogido no te puedes perder los siguientes consejos, porque con ellos elegirás la caseta correcta. ¡Come on!
1. Ten en cuenta el espacio de instalación
Es clave que hagas un buen análisis del espacio, no solo en cuanto a medidas, sino en cuanto a posibles obstáculos que podamos encontrarnos como árboles, límites de altura, vallas, etc. Todo esto será esencial para acertar con la elección de la caseta.
2. El material importa
El clima al que estará expuesta la caseta será determinante para escoger el material más apropiado. Los materiales principales con los que se construyen las casetas de jardín son: madera, metal y resina.
- Madera, precisa de tratamiento protector para dar su mejor versión. Son una buena opción, ya que son excelentes aislantes y de larga duración.
- Metal son sin duda la mejor opción calidad-precio. Son perfectas para climas con mucha humedad, ya que son resistentes a la corrosión.
- Resina son una buena opción para ambientes salinos, así como zonas lluviosas, en cambio su resistencia a los rayos UV no suele ser tan buena. Estas casetas no son buenos aislantes, ya que la resina absorbe mucho el calor.
3. Busca compañero de montaje
Cada caseta tiene un nivel de dificultad, por eso debes valorar si eres manitas o no antes de elegir tu caseta y si vas contar con ayuda para el montaje.
Las casetas de madera se pueden instalar por ensamblaje de paneles de madera o de lamas machihembradas. Suele llevar tiempo instalarlas y se necesita mínimo por dos personas.
Las de metal son más fáciles de montar, porque el montaje consiste en la unión de paneles de metal mediante perfiles y tornillos. Eso sí, aunque es más sencillo que las de madera son tediosas, ya que son muchos perfiles y tornillos. El montaje de estas casetas se recomienda realizar por al menos dos personas.
Las de resina se montan con bastante facilidad, ya que el montaje es mediante un sistema de clics, pero debido a ello también proporcionan menos robustez y firmeza a la caseta.
4. Un buen mantenimiento es esencial
Si estás buscando una caseta para instalar y olvidarte de ella, la caseta de metal es la mejor opción, ya que sólo hay que reemplazar la tornillería en caso de que se vea afectada por el paso del tiempo. Las casetas de madera son las que requieren un mantenimiento regular para mantenerla en óptimas condiciones. Por eso, será necesario lijarla y barnizarla al menos una vez al año.
Las de resina no requieren nada de mantenimiento, pero se deterioran rápidamente por los rayos de sol, si no tienen tratamiento UV. Además, los cambios de temperatura pueden afectar a la durabilidad del producto.
Es el momento de elegir. ¿Qué caseta es perfecta para ti? Descubre nuestra colección de casetas y compra la que se adapte a tus necesidades.